Guía para la acción.

Aun recuerdo cuando conocí y escuche por primera vez al Canserbero por recomendación de una amiga, recuerdo que cuando escuche está canción en particular me pregunte ¿Qué propongo? Es cierto que durante años estuve enojado con el sistema y las fuerzas detrás de él, sin proponer ni dar alguna alternativa, ya no digamos para los demás, sino más bien para la realización de uno mismo. Se pasa el tiempo y te das cuenta que las cosas no cambian, que las cosas que te rodean siguen estando igual que siempre, tal vez sea el equilibrio que necesita éste mundo y sobre todo tu contexto inmediato, en donde tal vez las cosas que vez no te gustan, por tanta injusticia que vez; llega el momento en donde dices, para qué luchar en un mundo en donde pareciera que la individualidad es lo mejor que puedes recrear y fomentar, el luchar por el otro como en otros momentos de nuestra historia humana ya no se valora, ni mucho menos se reflexiona, tal vez porqué hemos claudicado en una misma forma de lucha y no nos damos cuenta que los tiempos cambian y las manifestaciones deben de cambiar.

¿Qué estoy haciendo? ¿Por qué siempre estar enojado? ¿Por qué tener rencor a la vida y sus fenómenos sociales? y así perdía mi vida, señalado siempre como el insurrecto, el que siempre tiene que decir algo en las reuniones, clases y círculos cercanos  que van en contra de la forma de pensar de las mayorías, y te das cuenta que sólo pocos pueden comprenderte y te vas quedando con ellos, ellos que tal vez no concuerdan con tus ideas pero que al final aportar a ellas de cualquier manera. Y así te das cuenta que hay que proponer para tener una vida plena, en donde tus actos te hagan sentir bien y tal vez dejar una huella, a la gente que conozco o tal vez a la que no y que por el simple hecho de ver el acto le genere sentimientos que al final los haga cambiar de pensamiento (no importando que sea para bien o para mal, ultimadamente el fenómeno no es bueno ni malo, sino desde la óptica que sea vista)

Es muy corta la vida cómo para  estar siempre enojado, al final los actos son los que formaran mi personalidad, esa que siempre está en constante cambio por las personas que te rodean. Es histórica.
Es así que la propuesta para mi es, hacer los actos que me hagan sentir bien sin dañar ni hacer sentir mal a mis seres queridos, siempre tener respeto por aquellos que me quieren y siempre tener que levantar la cara ante todo y todos (afortunadamente aún no la bajo ante nadie o frente a alguien) seguir recorriendo kilómetros de experiencias y vivencias para seguir aprendiendo, empezar a creer en alguien, ese alguien creado por las masas en una de esas lindas historias épicas en donde la fe reina y te transporta a ese lugar seguro, seguro para hacer actos benéficos para ti y los que te rodean. Seguir siendo humano, esperando trastocar la gloria interna por el bien que se siente el hacer un acto en donde la felicidad prevalezca. Hacer lo que me toca hacer en mis círculos sociales inmediatos (familia, pareja, amigos, trabajo, comunidad, los otros y los demás) No idealizar a alguna persona u objeto, mejor es verlo autenticamente y saber que en esta vida nada es seguro, la vida da vueltas y muchas de las veces las personas no piensan o sienten con la misma intensidad que uno lo está haciendo. Saber que a toda vida hay una muerte. También que todo puede pasar siempre y cuando así lo quieras y hagas que suceda.

¿Y la felicidad qué? Claro siempre buscando la felicidad interior para poder transmitirla hacía los demás.  Conforme pasa el tiempo la juventud se termina físicamente pero no moralmente, la vida es un parpadeo y a veces nos preocupamos por estupideces. Listo.